Del expresidente de aquí y el expresident de allá



A las 8 en punto, con una puntualidad de la que no hacía mucha gala cuando estaba en su anterior cargo, llegó el expresident con su esposa, Diana Garrigosa. Media hora antes, su hija Airy había llegado para decirnos que "els pares ja estan venint".
Maragall está por dos meses de vacaciones en Argentina. El motivo de la visita es simple. Su hija ha venido a vivir aquí hace unos pocos meses y querían verla. Tal y como nos contó luego, era la primera vez que vistaba sin "obligación laboral" este país. Así que estaba contento. Desenfadadamente nos explicó que venían de hacer "5.000 km pel sud, amb un Suzuki petit que hem llogat" y que les había encantado el recorrido. Desde que llegó nos dijo que ha desconectado por completo de la política catalana. Aunque luego se contradice un poco y nos reconoce que "m'envien sms els amics" y que lee algunos días la edición de El País que llega a Buenos Aires. Después de tanto tiempo casado con el poder debe de ser inevitable un mínimo interés por tu excónyuge. La mayor parte del viaje la han pasado en Buenos Aires, y aparte del viaje por el sur en unos días se van a ir a Uruguay, para volver a Argentina y a mediados de febrero a Barcelona.
Antes de que Quim lo entrevistara, uno de los capos del Casal le quiso hacer un poco de tour por el viejo edificio pero al expresi no se le veía con muchas ganas de repetir la cosa protocolaria que ha vivido en los últimos 25 años ya fuera como alcalde de Barcelona o como presidente del gobierno catalán, así que aprovechó que le dijimos que el Barça había empatado a 1 con el Betis para preguntar cuándo, dónde y cómo podía ver el partido del Barça del domingo. En la tv de la sala Gaudí justo aparecía Mònica Terribas con su programa ya casi de culto de La nit al dia, y Maragall dijo: "mira, la Terribas" y se acercó a ver qué decía y a comentar cuatro cosas sobre la presentadora. Luego, aparecía Bush haciendo una alocución con dos de sus lugartenientes detrás y el expresi y exalcalde lanzó una pregunta-respuesta al aire: "Aquesta és la Belosi, no?". Ninguno de los presentes (el capo del Casal, Quim, Jael, la mujer de Maragall y yo) supo decirle si era o no era, así que iba repitiendo "és la Belosi, no?". Ya nos íbamos de la sala cuando se acercó su hija, y Maragall le dijo, "mira, la que surt a la tele és la Belosi".
La entrevista resultó interesante. Se nota que Maragall se ha quitado un peso de encima y que se lo empieza a mirar todo con nostalgia, sorna y esa actitud de "la de batallitas y cosas que he visto y oído yo en mis años de político". Así que nos contó alguna exclusiva, alguna off the record pero otras no, y se soltó un montón. Saltaba de un año a otro y de un tema a otro con facilidad y se reía a menudo. La única respuesta clara y concisa de toda la entrevista fue en el cuestionario "L'expresident es mulla", cuando ante la dicotomía: "Saviola o Gudjhonsen?" respondió con un rotundo y nada dubitativo: SAVIOLA. A lo largo de la entrevista soltaba algunas expresiones en castellano en medio de su discurso en catalán, con clara preferencia por "es lo que hay".Al final de la entrevista nos preguntó discretamente "puc fumar un cigarro?" y se encendió un Marlboro, como Quim, así que yo aproveché para encenderme un Camel y Jael tuvo que aguantar estoicamente durante cinco minutos el humo de los tres cigarros.
Ya acabada la entrevista, y antes de salir de la biblioteca, entró su hija y le dijo: además de Alfonsín ha venido la plana mayor de todos los del partido Radical para cenar. La cara de Maragall reflejó un: "uff, quin pal".
Así que inmortalizamos el encuentro en unas cuantas fotos con Maragall y Raúl Alfonsín, que para quienes no lo conozcáis fue el primer presidente de la Argentina democrática después de la dictadura atroz de 1976-1983. Alfonsín tiene actualmente 80 años.
La entrevista y las declaraciones de Maragall, en breve, en la revista Anem-hi!.
4 comentarios
maga -
busco...
la nostalgia me envía...
dice que busca más imagenes, más textos.
yo le avise que vos volvisté, que estás "aqui" y no más "allá", pero no me hizo caso, abrió esperanzada esta página, y como le dije yo, tuvo que ver la misma foto... congelada después de varios días... como símbolo del fin de tu viaje. (o "nuestro" fin como lectores, el fin que vos quisiste darnos)
ahora la nostalgia me dice que te diga que espera que hayas tenido un gran viaje, y que pese a nuestros tantos defectos argentinos hayas sabido ver más allá, y te haya encantado...
a la nostalgia me la llevaré prontito a su tierra, donde quizás se haga mayor. De vuelta no me cabrá en la maleta...
papu -
Què tal la filla del Maragall?
Mite -
Anónimo -